❖ MANABÍ▮El estrés y la depresión en Navidad: Un recordatorio de cuidarnos a nosotros mismos
La Navidad es una época esperada por muchos, llena de luces brillantes, música alegre y reuniones familiares. Sin embargo, para algunas personas, esta temporada también puede traer consigo una carga emocional inesperada. El estrés y la depresión son desafíos que, a menudo, se ocultan tras la fachada festiva.
Durante este tiempo del año, las expectativas de celebraciones perfectas, la presión por cumplir con las compras y los regalos, y la necesidad de mantener vivas las tradiciones familiares pueden resultar abrumadoras. Las expectativas sociales y personales, sumadas a la posibilidad de enfrentar dificultades económicas, pueden generar un sentimiento de insuficiencia o de no poder cumplir con lo que se “debe” hacer.
Además, aquellos que atraviesan duelos, ya sea por la pérdida de seres queridos o por momentos difíciles del pasado, pueden sentirse especialmente vulnerables. La Navidad puede intensificar estos sentimientos de tristeza o soledad, haciendo que el “espíritu navideño” no se sienta tan accesible como en años anteriores.
Es importante recordar que está bien no sentirse bien todo el tiempo, incluso en esta época del año. Nadie debe cargar con la presión de vivir unas fiestas perfectas. La belleza de la Navidad radica en los pequeños momentos de conexión y en la sencillez de lo que realmente importa. No se trata de los adornos, los regalos o la perfección, sino de la autenticidad y el amor que podemos compartir con los demás y con nosotros mismos.
Si el estrés o la tristeza te acompañan, no dudes en tomarte un tiempo para ti mismo. Puedes intentar respirar profundamente, dar un paseo, escuchar tu música favorita o simplemente descansar. A veces, lo que más necesitamos es un respiro y la oportunidad de reconectar con nuestras emociones sin juicio.
Las fiestas son solo una parte del año, y aunque pueden ser desafiantes, no definen nuestra felicidad. Si en algún momento sientes que la carga emocional es demasiado pesada, es valioso buscar apoyo en alguien de confianza o en un profesional. En medio de la alegría que nos rodea, también podemos encontrar espacio para cuidarnos y recordar que nuestra salud mental es fundamental para disfrutar de la vida en su totalidad.
